18.5.10

Un año y un día

  Así es, hace exactamente un año abandonaste este mundo, para irte a uno mucho menos infeliz.

  Tu cuerpo dejó de existir. No creo que pudiera resistir al paso del tiempo, a la acción de las bacterias, a los microorganismos que, seguramente, te devolvieron a la Madre Tierra. Pero tú sigues conmigo.

  Sabías que algún día se terminaría, siempre lo hiciste. A sabiendas de esto, hiciste lo imposible por conocerme. Me escribiste, me escribiste mucho. Y ahora que no estas físicamente, he comenzado a leerte. 

  Te he comenzado a leer y a conocer. Te preocupaba mucho tu pueblo, tu libertad, tu soledad, tu amor. Te importaba todo, y a la vez nada. Pero sobre todo, te importaba yo: tu lector.





Mario Benedetti
A un año de tu muerte,
continuas sorprendiéndome.






"Después de todo, la muerte es sólo un síntoma de que hubo vida"

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este Blog se alimenta de sus comentarios, aliméntelo.