Ya no se cuántas veces he pronunciado "estoy un poco hasta la madre" durante esta semana. La he de haber pronunciado unas 7 veces al día en el trabajo y unas cuantas más en las tardes, desde el jueves.
Le contaré [es aquí donde usted decide no leer mi aburrida historia y cierra el blog]. Corrían ya las primeras horas del jueves 22 de julio. Yo estaba feliz, pues el sábado mi jefe se iría de viaje, y regresaría hasta el sábado primero de Agosto; lo que implicaba, días sin hacer nada en la oficina, para mi.
Fui al trabajo, y al parecer la única feliz era yo, pues mi jefe estaba apuradísimo con todo lo que tenía que entregar del pago de impuestos, pues al parecer El jefe de mi jefe no quería que este se fuera sin terminar todo eso. Así que: ¿quién cree usted que salió hasta tarde ese día, cuando su hora d salida es 1.30 p.m.? Si su respuesta ha sido: "Tu, Garus" ha contestado bien, sino... ¿en qué madres estaba pensando?
Regresando a nuestro tema, por obvias razones llegue tarde a casa, y sólo quería acostarme a dormir un rato, pues la cabeza me daba vueltas. Llego y lo primero que me dice mi papá es: "Viene tu tío XXX, les vamos a dar tu cuarto". La verdad ya no me molesta ceder mi cuarto, lo que me cagó fue tener que ponerlo en orden.
Llegaron mis tíos, con sus 3 retoños: dos niños, uno de 8 y otro de 10, y una niña de 2 años y medio; y si usted ha tratado con niñas berrinchudas de esa edad, sabrá cómo me sentía para el final del día.
El viernes no fue algo tan distinto, volví a salir tarde, la misma historia de los berrinches de mi prima en casa.
Sábado. ¿Día de descanso? Para nada, trabajé de 9 a 1. De hecho mi jefe ya no estaba, así que fui a hacerme pendeja todo ese rato. Y, por si fuera poco, el tumblr no jalaba. En la tarde seguí peor, iba a salir con mis amigos y me pretendía poner un vestido. Utilizo la palabra "pretendía", ya que al ponérmelo me dí cuenta que ya no cerraba, imagínense mi reacción. La verdad es que tenía muchísimo sueño, y solo fui a poner cara de pocos amigos a la reunión. Salimos hacia la casa de mi amiga, y terminamos durmiéndonos a las 5.30 am del domingo.
Domingo, el día más mierda. Desperté a las 8.00 a.m., después de dormir 2.30 horas y media. Quede con mis papás de vernos para tomar el camión e irnos al rancho, al novenario de mi tío fallecido el viernes pasado. Llegamos al rancho, mi intención era ayudar un poco, y dar mi primera clase de folclor a mis sobrinos. Pero, antes de eso me enojé fuertemente con mi tía, quien es una ególatra de mierda. Y bueno, acabo por joderme el finde.
Amigo, este fue mi PINCHE FINDE DE MIERDA.
Siempre hay fines de semana así. Yo los tengo, como mínimo, tres veces por semana. Ánimo querida, ánimo.
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